Entrando por el pueblo de Aneto en la Ribagorça hacia el pantano de Llauset, encontramos una ascensión directa y apta para casi todos los públicos a dos tresmiles muy atractivos, el Culebras y el Vallibierna.
Con unas predicciones no muy favorables finalmente decidimos tirar para arriba, «hasta donde lleguemos ya que hemos venido hasta aquí…»
Decidimos cambiar la ruta de ascenso, en vez de hacer la circular y subir por el Estany Gelat directamente al vallibierna fuimos por el Vall de Llauset, más protegido del viento que soplaba y más soleado que la otra vertiente del Vallibierna. Y nos respeto, vaya si nos respeto.
El viento en la cumbre nos hizo desistir de ir hasta el Vallibierna, lo dejamos en el Culebras, quedará pendiente. Un buen dia de esqui de montaña…
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