Una buena ascensión para iniciarse en el esquí de montaña por la zona de Viella, sin duda es la ascensión al Tuc de Viella o Cap del Port, ya que sin grandes dificultades ni mucho desnivel se accede a una zona de gran belleza en el corazón de los Pirineos.

Tuc de Vielha desde Neres.

Tuc de Vielha desde Neres.

Viella es una zona curiosa dentro de los Pirineos, está situada en el mismo corazón, teniendo una comunicación muy mala tanto con Francia como con España. Antes de la construcción de los túneles, por supuesto. Este hecho ha propiciado que haya cambiado de nacionalidad varias veces a lo largo de su historia llegando incluso a ser independiente, y por supuesto que haya desarrollado un idioma y una cultura propia, debido a su aislamiento. En la actualidad pertenece a la provincia de Lleida y es muy conocida su gran estación de esquí Baqueira-Beret.

La comunicación con España es a través de un collado a 2442m. de altitud entre el Tuc de Viella y el Tuc des Neres que da acceso al valle del Ribagorza. Y esta es la ruta para la ascensión, siguiendo el camino que han seguido durante cientos de años los habitantes de Viella para hacer intercambios comerciales y demás gestiones con los pueblos del lado Español.

Caseta de Pastores, comienza la nieve.

Caseta de Pastores, comienza la nieve.

El inicio de la ruta se sitúa en la boca Norte del túnel de Viella, la que da al valle de Viella. Antes de entrar en el túnel, a mano derecha encontramos una pista asfaltada que lleva a una planta de Residuos Sólidos, y pasado esta planta comienza un camino que marca el inicio de la ruta.

En esta ocasión no ascendimos al Tuc de Viella, ya que nos recomendaron hacer el Tuc des Neres ya que tendría mejores condiciones para esquiarlo, cualquiera de las opciones es buena, dificultades similares y el mismo camino de aproximación, ya que solo los separa el collado antes citado.

Tuc des Neres.

Tuc des Neres.

Aunque había nieve, el manto no fue regular hasta  muy pasada una cabaña de pastores que nos encontramos en el camino, después de esta se asciende por una especie de morrena glaciar, donde nos calzamos los esquís y en dos horas y media en total estamos en la cumbre con muy buenas condiciones de nieve y una temperatura totalmente primaveral, almorzando en el collado en camiseta.

A mano izquierda durante el ascenso podemos admirar unas cumbres muy bonitas con grandes paredes rocosas,  incluido el Tuc de Viella que desde abajo presenta una pinta muy amenazadora, con paredes verticales que no dan el aspecto de una ascensión fácil. Una vez en la cumbre se puede ver el macizo de Madaletas y el Aneto, además de un montón más de montañas.

Cumbres alpinas.

Cumbres alpinas.

Un divertido descenso, en el que si no elegimos bien el itinerario nos tocara remar un poco, nos deja de vuelta en el coche.