Otro mes dedicado a la escalada en roca, esta vez quedamos en Sella. Nos daba un poco de miedo los calores de la primavera, que te pillan sin estar acostumbrado, así que decidimos escalar el sábado en la pared de Rosalía, donde la sombra nos protege hasta pasado el mediodía.
Nos dividimos en tres cordadas, unos a la vía Luna, otros a Tanit y los últimos a La estación de la bruja. Con la idea de cambiarnos después las vías y poder hacer por lo menos un par de ellas cada cordada. Pero el sol corrió más que nosotros y lo cambiamos por hacer deportiva en los sectores clásicos de Sella, un poco sobados de más pero por lo menos a la sombra por la tarde.
Dormimos en Sella y madrugamos a la mañana siguiente para dirigirnos al Penyal d’Ifac. La siguiente semana se celebra el rally de escalada del Penyal y hay varios tecnificados que se presentaran a la prueba con lo que aprovechamos el domingo para escalar en estas paredes y así entrenar para la gran paliza que les espera la semana próxima.
Escalamos las vías Gómez – Cano, Anglada – Gallego y El navegante, grandes clásicas del Penyal. Muy buen día acompañado de un poco de niebla marina que nos tapó el sol de mediodía y dio un ambiente espectacular a la escalada.
Poco a poco vamos cogiendo el ritmo de cara a las escaladas primaverales.
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